Mi primer #cumplelunas

¡Hoy quiero celebrar contigo el primer aniversario de mi blog!

Hace justo un año que publiqué el primer post del blog. Aunque mi marca y mi web nacieron unos meses antes, no fue hasta la última semana de enero cuando me animé a empezar el blog.

Aún recuerdo la emoción, los nervios y la incertidumbre al pensar si alguien me leería. Con el paso de las semanas me he sentido cada vez más a gusto escribiendo las nuevas entradas.

Así que te invito a acompañarme y echar la vista atrás a ver qué tal se me ha dado este último año.

Repaso a mi primer año de marca personal

Ha sido un año lleno de altibajos, de muchas emociones, de momentos buenos y malos, pero lo más importante es que de todo se aprende. Mentiría si te dijera que empezar un nuevo negocio y una nueva marca es tarea fácil.

Empiezas desde cero, con mucho esfuerzo y trabajo, con sueños y esperanzas que bien se pueden cumplir o verse truncados por el camino.

Pero por suerte (y mucho trabajo) aquí sigo un nuevo año con las pilas cargadas para dar lo mejor de mí misma y aprender de todo lo acontecido en 2018.

Mis primeros 6 meses fueron como estar en una especie de standby, en un prolongado letargo del que no terminaba de despertarme. Luego llegó el verano, mucho calor y vacaciones, y mi agenda de clientes se quedó igual que Sevilla en agosto, casi vacía.

Después llegó por fin “el despertar”, empezó septiembre y con él nuevos retos y oportunidades. Al igual que los niños tienen su “vuelta al cole” los nuevos clientes comenzaron a llegar (y muchos además para quedarse).

Realicé mi primer taller presencial en la feria de bodas Wedding Sevilla, di mi primera ponencia en FDF Sevilla 2018 un congreso de fotografía de bodas, crucé por primera vez el charco para disfrutar de mis primeras vacaciones en Cuba y me lancé a la piscina dándoles mi ‘Sí, quiero’ a las chicas de Nupcial.es en cuanto me contaron la idea, sin saber siquiera la acogida que iba a tener en el sector.

Desde septiembre hasta final de año me he estrenado en muchas cosas y he podido experimentar muchas primeras veces. Nuevas aventuras que son maravillosas pero a la vez aterradoras ante la incertidumbre del “¿lo haré bien?”.

Hoy no puedo estar más contenta por haberlo hecho, por haberme animado a realizar todas estas y muchas otras primeras veces de Lidia Luna.

Y con todo ello, he podido hacer un balance del año para pensar bien cuáles serán mis próximos pasos y mis propósitos copy de 2019 para mejorar mi marca.

Lo mejor y lo peor del 2018 de Lidia Luna

Mis logros:

• Conseguir una bonita comunidad de suscriptores que leen mi blog.
• Hacer un taller presencial.
• Dar una ponencia.
• Colaborar en nuevos proyectos.
• Ofrecer nuevos servicios.

Mis errores:

• No priorizar mis posts y que tengan el mismo nivel de importancia que los de mis clientes.
• No dedicar el tiempo necesario a mi marca, estrategias de marketing, etc.
• No ser constante en mis propias redes sociales.
• Vender mejor los negocios de los demás que el mío propio.

He aprendido grandes lecciones.

Debes cuidar tu negocio por encima de todos tus clientes pero no por encima de tu salud, eso es lo primero y más importante. Dedica tiempo a mimar tu marca y reserva en tu agenda un hueco para tu desarrollo personal.

Trabajo, esfuerzo y pasión. Que nunca falte la pasión por lo que haces, será el motor que te impulse en los días grises.

He afianzado mi propia filosofía, ya que cada vez me gustan menos el marketing de fórmula y los textos de plantilla. Me dan alergia.

Me he cansado de ver textos idénticos con cuatro palabras cambiadas para adaptarlo a cada negocio, las mismas secuencias de bienvenida que cuentan siempre lo mismo y el mismo tipo de titulares sensacionalistas… ¡basta ya!

Creo firmemente que cada marca es única, tiene una personalidad, una voz y unos valores que la hacen especial. Con lo cual lo que le funcione a los demás no tiene por qué irte bien a ti.

Por eso mis textos siempre serán genuinos y exclusivos para cada cliente. Porque no lo concibo de otra forma. Si tu marca es extraordinaria tus textos no pueden ser calcados a los demás. Tenlo siempre presente.

Así que voy a respirar hondo, felicitarme a mí misma por los pequeños grandes logros y a coger impulso para que 2019 sea un año genial.

¡Gracias!

Quiero agradecerte haber estado ahí, al otro lado de la pantalla leyendo mis post y acompañándome en este primer año de aventura.

Espero que sean muchos más y poder seguir contando contigo ?

Y como buen aniversario que se precie hay que salir a celebrarlo. Así que te animo este finde a no perderme la pista en Instagram para acompañarme en la celebración.